La Feria de Editores reunió en la Capital en una nueva sede junto a 280 sellos y escritores extraordinarios.
Se destacaron la mexicana Margo Glantz, el estadounidense Peter Orner, la filósofa eslovena Renata Salecl o la brasileña Amara Moira, a proponer lo que ya es un clásico: la reunión entre autores, escritores y lectores
Una vez más, la Feria de Editores (FED) mostró el pulso de la edición independiente en su 11ma. edición, para una escena eminentemente lectora en un escenario crítico, aunque con una industria siempre en movimiento, que el viernes, sábado y domingo próximos pasados desembarcó en una nueva sede junto a 280 sellos y escritores extraordinarios.
Nuevo espacio, más editoriales, actividades presenciales y digitales. Así presenta la FED la actividad que mantendrá por tres días de 14:00 a 21:00. «Volver a contar con editoras y editores detrás de las mesas ofreciendo lo mejor de la edición independiente es una gran alegría que trasciende la feria -dice uno de los organizadores, Víctor Malumián- porque su reencuentro deriva en nuevas complicidades y proyectos”. Los sellos convocados hablan de federalidad y trascienden el mapa local: 50 de los 280 no son de Buenos Aires, y 40 de esos 230 restantes son del exterior. «El espacio ganado por la FED en el calendario regional de actividades culturales se debe al trabajo mancomunado de las editoriales y va más allá de esta feria -señaló Malimián-, se puede ver en nuevas distribuidoras que son la unión de pequeños sellos, en premios colectivos o actividades donde se unen para potenciarse mutuamente».
«No es nada sencillo convertirse en una cita obligada dentro la nutrida agenda cultural porteña», aporta Alejandro Dujovne, especialista en políticas públicas del libro y «proveedor» de las cifras y relevamientos que permiten medir cómo se ha expandido el encuentro desde su primera edición. «Desde los días de los primeros encuentros en la radio La Tribu hasta hoy, la FED no paró de sumar propuestas cada año, ni de evaluar y repensar su funcionamiento. Eso le ha permitido estar a la altura, y al mismo tiempo dinamizar el mundo editorial que busca albergar», acotó.
La FED, que comenzó en 2013 con 15 sellos reunidos en una radio de Almagro para mostrar sus catálogos y dialogar con sus lectores, convocó en 2021 a 16.000 visitantes, año del retorno presencial post aislamiento pandémico, y este 2022 triplica su espacio mudándose al porteño C Complejo Art Media (Corrientes 6271, en el barrio de Chacarita) con entrada gratuita.
La audiencia preferencial de la FED, indica Dujovne, está compuesta por «lectoras y lectores intensos en el sentido del número de libros que lee al año y del conocimiento que tiene de autores, títulos y editoriales, un universo de lectoras y lectores que se recorta del visitante más extendido de otras ferias y de la sociedad en general», si bien «la feria atrae a muchos públicos distintos con interés y prácticas de lectura diferentes».
Libros contra la corriente
Pez Menta, un sello mendocino que publica libros álbum e ilustrados que proponen nuevas miradas para lectores de todas las edades, llega a la FED por primera vez, y lo hace como parte de los sellos seleccionados dentro del inédito programa +300KM, promovido junto al ministerio de Cultura de la Nación, que cubre gastos de pasaje, stand y hotel para editores que estén a más de 300 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires.
«Buscamos descentralizar el mercado editorial con libros producidos en Mendoza para el mundo a partir de lecturas que funcionen como un espacio de libertad y puentes de conversación. Para una editorial independiente las condiciones siempre son difíciles, sumado a que desde las provincias cuesta mucho lograr visibilidad, la FED se vuelve una gran oportunidad de mostrarnos y conocer lo que hacen lxs otrxs», explicó María Luz Malamud, una de sus creadoras. «Este apoyo a los sellos de las provincias, como el que reciben las librerías, es fundamental para incluir nuevas voces y favorecer la bibliodiversidad, habla de una política federal muy necesaria para quienes creamos bienes culturales y sirve para afianzar el ecosistema de la edición independiente», aseguró.
Habrá la ya clásica mini FED, el espacio dedicado a las infancias con actividades recreativas que se sumarán a los títulos exhibidos; y se entregará un nuevo Premio a la labor librera: 350.000 pesos para comprar libros dentro de la feria, incluso al 50% en los stands adheridos. En esta segunda edición compiten las librerías bonaerenses City Bell Libros, Musaraña y Patio interno, la cordobesa Volcán Azul, y la porteña Vuelvo al sur. El objetivo es reconocer su trabajo más allá de la venta de libros, focalizando en las tareas de difusión y dinamización del pensamiento y la literatura.
«La FED es una feria pensada desde lo logístico para las pequeñas y medianas editoriales desde el espacio hasta sus actividades, donde solo participan autoras y autores que publican en los sellos participantes. El principal desafío radica en la ampliación de ese espacio expositivo y en mantener el premio a la labor librera y la calidad de los invitados», detalló Malumián.
La especialista canadiense en urbanismo y género Leslie Kern es una de las presencias extranjeras que protagonizarán algunas de las charlas presenciales, con aforo para cien personas.
La virtualidad, presente en siete streamings que se alojarán en el canal YouTube de la FED acercará a tres escritoras latinoamericanas imperdibles: Jazmina Barrera (México), Vanessa Londoño (Colombia) y Lorena Salazar Masso (también Colombia), traídas por los sellos Eterna Cadencia, Concreto, Alto Pogo y Montacerdos.
La virtualidad se extiende a www.feriadeeditores.com.ar, donde puede consultarse el cronograma completo de la feria, al IG @feriadeeditores, el FB @feriadeeditores y el Twitter @feditores.
Entre las propuestas locales están el diálogo que grandes escritoras como María Negroni, Betina González y la cordobesa Eugenia Almeida mantendrán sobre el ensayo como construcción literaria; o la charla que otros dos reconocidos autores, Paula Puebla y Luis Guzmán, tendrán sobre deseo realidad y escritura. Parte de las propuestas que traen consigo editoriales como Gog y Magog, Ampersand, 17 Grises y Ediciones Documenta Escénicas.
La lista de participantes es extensa: El cuenco de plata, Caja negra, Ediciones Godot, Sigilo, Entropía, Gourmet Musical, Blatt & Ríos, Corregidor, Marea, Años Luz, Siglo XXI, Mardulce, Conejos, y Hojas del Sur -sello que publica al escritor Nelson Specchia, son sólo algunos.
El cuervo (Bolivia), Fósforo (Brasil), La pollera (Chile), Alquimia (Chile), Barrett (España), Criatura (Uruguay), Gris tormenta (México) y Colmena (Perú) forman parte de la traza internacional presente en la FED. Limonero, Pequeño Editor, Libros del Zorro Rojo, Calibroscopio y Común algunos de los sellos que pueden buscarse para los más chicos, aunque no excluyentes para adultos.