Unipersonal de Ariel Osiris que sube a las tablas del Teatro Anfitrión.
¿Cuánta tristeza puede contener un cuerpo antes de reaccionar contra ella?—
Sinopsis:
La pregunta motoriza la narración de este unipersonal. El hombre que de niño jugaba con dinamita tematiza sobre la tolerancia a las diferentes formas que puede adoptar la tristeza y los motivos que la originan.
Un hombre decide saldar cuentas con su historia, con un pasado muy lejano pero que nunca dejó de atormentarlo. Para ello, una noche se refugia en el follaje de un cerro y vigila una casa solitaria que es habitada por otro hombre; lo acompaña Silicio, su gato. Juntos esperan el momento adecuado para llevar adelante el plan que imagina cerrará esa herida. Pero algo falla. La situación le exige un cambio drástico.
El paso del tiempo puede sanar las heridas, como también puede acentuar los dolores hasta que el cuerpo no logra contenerlos y reacciona. El hombre que de niño jugaba con dinamita intenta responder cuáles son las consecuencias de esa reacción.
El hombre que de niño jugaba con dinamita
de
Pehuén Gutiérrez
Con
Ariel Osiris
Diseño de luces: Lucas Orchessi
Diseño de escenografía y vestuario: Maite Corona
Diseño sonoro: Gabriela Calzada
Diseño gráfico: Pablo Vega
Realización de escenografía: Maite Corona y Walter Lamas
Community Manager: Nico Matias Urra
Gestión y Producción ejecutiva: Gabriel Cabrera
Dirección: Pehuén Gutiérrez
Funciones: sábados 18 hs
Teatro Anfitrión, Venezuela 3340, CABA
Localidades: 3.000 pesos. Estudiantes y jubilados 2.500 pesos. Compra y reserva por www.alternativa.com o en la boletería del teatro.