La troupe platense de Laika Perra Rusa ya fue una banda de guitarras confesionales y ya fue una banda de electropop subversivo que, en plena cuarentena, pudo surfear con baile el momento más álgido de su contemporaneidad.
Ahora, en su tercera vida, el grupo está indagando en la potencia y las posibilidades del pop en clave latinoamericano. Siempre desde su trinchera, entre el hedonismo y la indignación, con sus sintetizadores y sus letras existencialistas, Laika Perra Rusa se aferra al sonido y la plástica del mejor pop, pero atravesado por las experiencias, la desesperanza y el humor que únicamente puede encontrarse en el sur del mundo.
Con dosis idénticas de horror y de coreografías, Laika Perra Rusa está presentando «Bum», single que adelanta un nuevo disco que verá la luz en 2023, y que devanea sobre los temas que siempre han inquietado a la banda: los entresijos del trabajo asalariado, los movimientos sociales, las pequeñas formas de anarquía en lo cotidiano, y la comedia, el baile y la performance como forma de desactivar la realidad consensuada.
Dirigido por Teo Palvi, responsable de Jornada (2021), una pieza audiovisual en vivo que consolidó la estética de la banda, el lanzamiento viene acompañado por un video alucinado y frenético que retoma a sus personajes recurrentes: una serie de activistas performáticos y sus acciones urbanas entre la fiesta y el espanto. Tan inquietante como el Crash de Cronenberg, tan hilarante como los funcionarios que imaginaron los Monty Python, un video donde políticos desaforados, noticieros absurdos y autos que colapsan, se mezclan, por supuesto, con la coreografía, el disfrute, el ritual y el espectáculo en clave protesta.